Humimesis

biomimesis-biodiversidad

Hay ideas que nos rondan por la cabeza durante un tiempo hasta que, tras haber conectado “puntos” previos, empezamos a ver unas posibles maneras de dar forma y sustancia a esos pensamientos. Esos “puntos”, ingredientes clave de la fase ideación, son el fruto de un proceso continuo de aprendizaje formal e informal, de revelaciones súbitas, charlas inesperadas y muchas lecturas sobre otras ideas y conceptos.

Parte de este proceso son los “descubrimientos accidentales”, que alguien poco atento, podría llegar a llamar erróneamente “fortuitos”. No lo son, puesto que suceden justamente sólo si estamos preparados para ellos. Hace unos años descubrí “fortuitamente”, que existía una disciplina que estudiaba cómo entender y extraer de la naturaleza los principios más importantes que rigen su funcionamiento para aplicarlos a los retos a los cuales nos enfrentamos como humanos y como empresas.

Me pareció increíble, y fascinado, empecé a ver vídeos y a leer mucho sobre ella. Empecé a usar la Biomimésis (así se llama, Biomimicry en inglés) en mis presentaciones y me ha servido como punto de partida para nuevas potenciales teorías que se me fueron ocurriendo. Biomimésis (o Biomimética) se compone de Bio (vida) y mimesis (imitar), una mezcla muy prometedora. Se trata de una disciplina que nos ayuda a estudiar y comprender mejor cómo los ecosistemas vivos se desarrollan, prosperan, luchan, cooperan, se protegen, se alimentan, etc. dentro de un cierto contexto ecológico.

El “cómo” lo hacen, es lo que nos interesa e intriga, sobre todo si pensamos a que este sistema complejo se basa en un equilibrio dinámico que sigue desde el origen de la vida en la tierra, hace 3.8 mil millones de años.

Más allá de tecnologías que copian la naturaleza (como por ejemplo el velcro, celdas fotovoltaicas, la forma de los trenes…), que quizás sea lo primero que se nos ocurra, podemos llegar a entender cómo organizarnos mejor, trabajar menos, responder a emergencias, contaminar menos, etc.

Copiar como las hormigas del fuego, en la selva Amazónica, se organizan para salvar juntas la colonia, en poco minutos, frente a las inundaciones estacionales, por citar un ejemplo, es simplemente asombroso.

Hablamos de un universo enorme y fascinante, del cual queda mucho por descubrir y que con la actual pérdida de biodiversidad provocada por nuestro modelo económico, está siendo amenazado y destruido a una velocidad vertiginosa. Alguien dijo un día, cada especie que desaparece, es una biblioteca que se pierde.

En ámbito profesional, este descubrimiento me ha ayudado no sólo en los contenidos de mis presentaciones cuando enseño Diseño Sostenible o Economía Circular, sino en mi proyecto de emprendimiento que se beneficia de un mayor entendimiento del ecosistema económico y laboral gracias a la bioinspiración como “mantra” y lente de observación.

La biomimesis, como ciencia que “hibridadora”, da pie a ulteriores inspiraciones de las cuales surge la Humimesis, otra palabra compuesta, que combina: human (humano) y mimesis (imitar).

Este concepto novedoso nace tras años de viajes y exploración, nace estudiando y observando los pueblos del mundo y las diferentes culturas que habitan en ello.

Se trata de extraer los principios de resiliencia, supervivencia y prosperidad que podemos identificar en las miles de diferentes culturas que existen en la tierra y que están desapareciendo por la globalización. Como la biomimésis, la humimesis ayuda a entender las dinámicas humanas (personales y dentro de un contexto social y empresarial) para identificar buenas prácticas y posibles formas de organización. Estos principios, igual que los biomiméticos nos pueden servir para diseñar mejores negocios, mejor organizados, más eficientes y felices. Es una combinación de antropología, ecología, economía y sociología que da como resultado unas pautas interesantes para entender mejor nuestra realidad y actuar sobre ella para ayudar al cambio de paradigma hacia un mundo más sostenible y próspero.

Entender las prácticas comerciales de los beduinos en el desierto, las increíbles características del idioma criollo en el caribe, la milenaria arquitectura mediterránea en gestión del agua y la agricultura, lo métodos de caza, recolección y redistribución social que fomentan la colaboración o la competición, la teoría de forrajeo optimal por citar algunos ejemplos. Viajamos en el tiempo y en el espacio para redescubrir y reconsiderar los libros de historia y geografía desde una perspectiva nueva, más curiosa y atrevida. El liderazgo, el poder, el juego, la sexualidad en las diferentes culturas. Las nuevas formas de colonización y contagio cultural que se difunden imparables o que por el contrario encuentran una resistencia autóctona indomable. Se trata de ver con ojos más atento cómo la tradiciones se están adaptando o resistiendo a las fuerzas transformadoras de internet y del mercado libre.

Estudiamos la época de los piratas, las complejas civilizaciones precolombinas o la transición de lo rural a urbano de los últimos 50 años. Leemos con otra mirada los testimonios de los deportados de los campos de concentración Nazi, su “kombinacja” (“buscarse la vida” se podría traducir desde la jerga del campo) es resiliencia pura y nos lleva a reflexionar sobre cómo han sobrevivido a la destrucción psicofísica a la cual estaban sometidos. Buenas prácticas que desafían nuestro entendimiento del mundo y nos pone frente a nuestra misma naturaleza, nos obliga a la reflexión, a la honestidad y a la duda que enfrenta cooperación con lucha sin escrúpulos para someter al otro y así arrebatarle el último cacho de pan.

Vemos las culturas indígenas, su simbiosis con el entorno, sus reglas de convivencia con el ecosistema y entre ellos mismos, aprendemos en qué escala puede funcionar una empresa basada en estos principios y que duren en el tiempo. Reconocemos la sabiduría, la organizamos y la recontextualizamos para que no se pierda.

La humimesis, es un primer paso hacia una nueva manera de entender el ser humano y su relación con su profesión, su familia y su entorno. Inspirado por la interpretación que él o ella misma tiene del mundo, acercarnos a aquellos patrones que nos puedan servir para rediseñar nuestra economía, nuestras ciudades, nuestros negocios.

Uno de los factores que han influenciado y siguen impulsando esta investigación interminable de los “por qués” del mundo es la necesidad de entender el rol de cada uno en la sociedad y en el entorno profesional. El proceso de creación y gestión de empresa, por ejemplo, encuentra en la humimesis posible inspiración para explorar nuevas formas organizacionales y económicas más resilientes, más flexibles, más humanas, más felices.

¿Están en los libros de antropología o arqueología las respuesta que muchos profesionales, emprendedores, estudiantes, etc. están buscando? La humimesis nos enseña que sí, pero hay un todo mundo todavía por descubrir y como dijo André Gide, si no tenemos el valor de dejar la vista de la “orilla” desde la cual zarpamos durante un largo tiempo nunca encontraremos nuevos territorios.

 

Artículo escrito Nicola Cerantola • Fundador y Director de Ecologing
Publicado en el nº 10 de la revista Ideas Imprescindibles