Los tecnoadictos, una generación enganchada a la tecnología

Los jóvenes viven enganchados al móvil. Según diversos estudios, los jóvenes españoles pasan una media de 5 horas y 15 minutos al día pegados a su móvil. El móvil les conecta con sus amigos, les reafirma y les hace sentirse integrados. Por desgracia esa dependencia se está convirtiendo en una grave patología para el 1,5% de nuestros jóvenes. Y además, el 21% están en riesgo de convertirse en adictos a la tecnología.

La adicción a Internet, un trastorno que afecta a jóvenes de todo el mundo

La adicción a Internet está reconocida desde hace años como un trastorno clínico en países como China, Japón y Corea del Sur. En muchos países occidentales, Estados Unidos y España están a la cabeza, también se ha avanzado mucho en este terreno en los últimos años. Las autoridades sanitarias chinas, japonesas y coreanas reconocen oficsialmente diversas formas de adicción a la tecnología, entre ellas el abuso de Internet y los videojuegos. Ambos países cuentan ya con numerosos centros donde se intenta rehabilitar a los jóvenes para que superen su adicción a la tecnología.

En China, la adicción a Internet se ha declarado crisis de salud nacional. Ha sido el primer país del mundo en diagnosticar esta patología. La adicción a Internet se ha convertido en un problema critico entre los adolescentes chinos. “Web Junkie” (Yonquis de la web) es el título de un documental de nacionalidad estadounidense-israelí que muestra los trágicos efectos que produce la adicción a Internet y los videojuegos en los jóvenes chinos. El documental está rodado dentro de las instalaciones de Daxing Boot, en Pekín, un centro de rehabilitación que parece más un campamento militar. El documental muestra imágenes sobrecogedoras de jóvenes que deben superar su adicción y que en muchos casos llegan al centro engañados por sus padres. Puedes ver el documental completo en este enlace.

En Corea del Sur más de 150.000 jóvenes son adictos a Internet, pero algunos estudios sugieren que la cifra puede ser aún mucho mayor. Muchas escuelas han implementado programas especiales para evitar que los niños y las niñas caigan en la adicción a Internet o los videojuegos. Al igual que en China, en Corea del Sur existen centros de rehabilitación que cada año acogen a miles de adolescentes adictos a la tecnología. Por ejemplo, sólo en el campamento de la región de Muju, cada año tratan a unos 1.200 jóvenes.

En Japón el 18% de los jóvenes juegan más de tres horas al día a videojuegos. Son datos de un estudio realizado por el Centro Médico y de Adicciones del Hospital Kurihama, entre 9.000 jóvenes cuyas edades oscilaban entre 10 y 29 años. El 80,7% usaban su móvil para jugar, el 48% jugaba en una consola y el 33,6% en una consola portátil. Una mayoría aplastante, el 97,6%, afirmaba jugar en su casa.

La soledad, el origen de las tecnoadicciones

Muchos especialistas médicos que tratan a diario a estos jóvenes víctimas de las tecnoadicciones afirman que la soledad y la incomprensión suelen estar detrás del abuso de Internet y los videojuegos. La mayoría de estos jóvenes buscan desesperadamente una vía para refugiarse de una realidad que les agrede o de unos padres que no les comprenden. 

Los jóvenes adictos a Internet presentan síntomas muy similares a otras adicciones como el alcoholismo o la drogadicción. Su malestar tanto físico como psicológico es comparable al que padecen los adictos a sustancias estupefacientes como la heroína o la cocaína. De hecho la reacción que produce en el tecnoadicto la recepción de una notificación en el móvil aumenta la segregación de dopamina, un neurotransmisor que genera placer y que se también dispara con el consumo de alucinógenos.

En los centros de rehabilitación suelen emplear metodologías que ayudan a los jóvenes a tomar conciencia de la realidad. Su tecnoadicción les empuja a crearse una realidad paralela, donde no existen las responsabilidades y las obligaciones de la vida real. Incluso muchos de ellos descuidan su higiene, su alimentación o sus horas de sueño. Los terapeutas les obligan a cumplir un horario y les establecen unas rutinas que les ayudan a llevar una vida ordenada: madrugan, se hacen la cama, se duchan o recogen la mesa.

Las tecnoadicciones en España

En España, el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social reconoce que un 10% de nuestros jóvenes abusa de Internet, el móvil y las redes sociales. Esta adicción suele provocar además un deterioro en la relación entre padres e hijos, que en algunos casos desemboca en el abandono de los estudios. La ONG Proyecto Hombre, fundada en 1984, y conocida por ayudar a miles de jóvenes a superar su adicción a las drogas, lleva 10 años desarrollando programas de ayuda a jóvenes adictos a internet y los videojuegos. En la actualidad más del 8% de los jóvenes que acuden a sus instalaciones son adictos a las nuevas tecnologías.

La Comunidad de Madrid ofrece un servicio pionero a través del Centro de Adicciones Tecnológicas. El perfil de los jóvenes que acuden son en su mayoría varones, que han sufrido bullying, depresión o algún conflicto interparental. El servicio se basa en diversas técnicas de terapia grupal, combinadas con sesiones de evaluación específica, y está coordinado por especialistas que ofrecen a los adolescentes y sus familias una asistencia en tres áreas: prevención, formación e intervención. El tratamiento suele tener una duración de tres meses y requiere por parte de los jóvenes un proceso de introspección y autoanálisis que genera situaciones dolorosas.

Es evidente que la adicción a Internet y los videojuegos empieza a ser un problema grave en los países desarrollados. Por esta razón, los gobiernos deben afrontar esta patología con el rigor y los recursos necesarios para intentar paliar los dramáticos efectos que las tecnoadicciones producen en los jóvenes.