Granjas verticales: la tecnología al servicio de la agricultura
Uno de los mayores desafíos a los que se enfrenta la agricultura es la cadena de suministro y el transporte logístico. Transportar productos perecederos a otros lugares del país, e incluso del mundo, se ha convertido en un reto ineludible. Por esa razón, una de las mejores opciones que hoy existen son las denominadas granjas verticales.
¿Qué es una granja vertical?
En este sentido, el sector de la agricultura cuenta en la actualidad con una solución de ingeniería perfecta para solucionar este problema. Se trata de un sistema que es capaz de transformar por completo la cadena de suministro que va desde la granja hasta la mesa del consumidor.
A través de la granja vertical, los profesionales de la agricultura son capaces de labrar sus huertos, apilando cada una de las plantas en bandejas o torres. Como si de un edificio se tratara. De esta manera, es posible plantar una gran cantidad de hortalizas o vegetales en un espacio muy reducido. Esta ventaja acaba siendo realmente beneficiosa, especialmente si se trata de áreas urbanas.
De hecho, también puede ser altamente recomendable en aquellos lugares donde la tierra es escasa o el clima no es el más adecuado. Además se trata de una alternativa mucho más segura, porque no es necesario el uso de ningún tipo de pesticida o producto químico. La generación de residuos es uno de los problemas más graves a los que se enfrenta nuestra sociedad. Las granjas verticales necesitan una menor cantidad de agua, lo que también contribuye a reducir la sequía del planeta.
La organización Vertical Farming Institute, es una de las referencias en esta metodología a nivel mundial. Según sus estudios, cada metro cuadrado dedicado a la agricultura vertical es igual de eficiente que 50 metros cuadrados de tierras cultivadas de manera tradicional.
Componentes básicos de las granjas verticales
Cualquier proyecto de granja vertical que se lleve a cabo, estará compuesto principalmente por tres elementos. En primer lugar, la estructura general del sistema en forma de planta vertical o edificio. En segundo lugar, la estructura eléctrica que ayuda a conseguir todas las ventajas de este sistema de ingeniería. Y finalmente, la estructura de plomería, que funciona de una manera similar al sistema de drenaje de tu casa. Su función es transportar el agua a través de las diferentes cajas que componen al sistema. A la hora de planificar la agricultura vertical, todo dependerá de estos tres elementos. Dictará su ubicación, así como los recursos que se van a utilizar para cumplir los objetivos.
Beneficios principales de la agricultura vertical
Los beneficios que están asociados a la agricultura vertical son diversos. Algunos de los más destacados que debes tener en cuenta son los siguientes:
- Alto rendimiento: A diferencia de los sistemas tradicionales, el vertical permite conseguir una mayor cantidad de producción con menos tiempo y recursos.
- Mejor calidad del cultivo: El producto final que acabas consiguiendo será de mejor calidad y naturalidad que en un sistema tradicional.
- Menor necesidad de recursos: La cantidad de agua necesaria en una granja tradicional es mucho menor que en el caso de los cultivos habituales.
- Más respetuoso con el medio ambiente: Además de necesitar menos espacio, también se requiere un menor uso de pesticidas. De esta manera, se consigue reducir la contaminación en la naturaleza.
- Poder producir durante todo el año: Hay hortalizas y frutas que solo puedes cultivarlas en determinados momentos del año. A través de este sistema se obtienen productos naturales en cualquier mes del año.
Algunos de los proyectos más destacados de agricultura vertical
A lo largo de la historia se han llevado a cabo diferentes proyectos de granjas verticales. Es importante entender el origen para conocer el presente de esta solución de ingeniería.
Aeroponía
Esta técnica permite el cultivo de plantas en zonas sin tierra o aire, y además, prácticamente sin agua. Las semillas se colocan en macetas junto a trozos de espuma. En uno de los extremos estarán expuestas a la luz, y en el otro a los nutrientes. La espuma juega un papel muy relevante, ya que permite mantener la estructura de la planta mientras crece a buen ritmo.
A través de esta solución, la planta puede absorber una mayor cantidad de nutrientes. El resultado son productos finales mucho más saludables y nutritivos. Fue desarrollada por la NASA a finales del siglo XX.
Hidroponía
Como indica su nombre, el agua es uno de los elementos fundamentales. No se usa ningún tipo de tierra, y las raíces quedan sumergidas en disoluciones minerales que son ricas en nutrientes. La agricultura hidropónica es una de las técnicas más habituales que puedes encontrar. En los últimos meses, se ha incorporado la inteligencia artificial o el Internet de las cosas a este sistema.
Acuaponía
Finalmente, uno de los últimos proyectos de granja vertical está basado en el cultivo con peces en el mismo hábitat. Estos animales crecen en estanques interiores produciendo un gran número de nutrientes en forma de desechos. Esto es, principalmente, la fuente de alimentación de las plantas.
Como conclusión, las granjas verticales aportan una gran solución de ingeniería al sector agrícola. En un mundo cada vez más globalizado, las granjas verticales suponen una alternativa muy interesante para apostar abiertamente por un mundo más sostenible.